La pandemia mundial de COVID-19 nos ha traído una gran cantidad de cambios. Algunos han sido realmente terribles, otros, simplemente han pasado a nuestro día a día como algo normal.
Uno de estos grandes cambios ha sido el auge del teletrabajo. Si antes de la pandemia apenas el 5% de los trabajadores españoles utilizaban esta modalidad, durante la pandemia el porcentaje se multiplicó por 10, superando ampliamente el 50% (aquellos que tuvimos esa suerte).
Pero parece que este cambio ha venido para quedarse. Según publica en su número de febrero de 2021 la revista Forbes España, el 62.5% de los trabajadores españoles esperan que el teletrabajo termine ganando la batalla y de una u otra forma, permanezca más allá de la pandemia como algo habitual. Un dato curioso, es que son los mayores de 45 años los que más apuestan por este formato de trabajo, frente a colectivos más jóvenes (por ejemplo, el porcentaje se reduce al 47% en el caso de los profesionales menores de 25 años).
Esta tendencia nos deja una pregunta: ¿Cómo afrontaremos un futuro de teletrabajo o de trabajo mixto (oficina y teletrabajo) los profesionales? ¿Estamos preparados para esto?
La importancia de la formación
En este contexto la formación toma una especial importancia. Como profesionales, nos vemos obligados a adquirir nuevas competencias y habilidades. Ahora el trabajo en equipo, la forma de ejercer el liderazgo o la colaboración se transforman, ya que tenemos que ser capaces de adaptarlas a un entorno remoto, sin contacto personal.
Además, cada vez es más común teletrabajar con personas de diferentes lugares, e incluso, de diferentes países. Es un entorno donde el profesional toma las riendas de su propio desarrollo y esto incluye tomar conciencia de la importancia de mantenernos actualizados.
#Learnability es una palabra que no podemos perder de vista y que podría resumirse como nuestra capacidad de aprender cosas nuevas de forma autónoma y de manera continua. La formación on-line es nuestra gran aliada en esto, e igual que tenemos plataformas que nos ayudan a conectar con compañeros, enviar correos, publicar post como este o gestionar proyectos; tendremos que acostumbrarnos a tener acceso a plataformas de formación continua donde nosotros seamos los responsables de nuestro propio desarrollo.
Y las empresas, ¿qué tienen que decir?
Desde el punto de vista de la empresa, ocurre también un importante cambio. Si hasta ahora, la disyuntiva se centraba en formación presencial contra formación on-line, ahora el enfoque debe ser de facilitar acceso a diferentes herramientas de autodesarrollo a los empleados.
Las empresas tienen que evolucionar hacia modelos donde el empleado tenga el control de su formación. El teletrabajo ha traído la digitalización completa del día a día. Supone una mayor responsabilidad y confianza sobre el empleado que debe ampliarse a todos los ámbitos de relación con el equipo, incluida la formación. La empresa debe preocuparse en ofrecer acceso a la mayor cantidad de herramientas posibles para facilitar ese desarrollo. ¿Está tu empresa preparada?
Leave a Comment